domingo, 7 de septiembre de 2014

Aquel sol blanquecino de medianoche...


Lo que te define es el blanco. Blanca tu sonrisa, blanca tu alma.
Blanco también es lo que ves cuando mirás el sol.
El blanco es la combinación de todos los colores, el blanco es el comienzo de todo y el fin de nada.
No creo que haya nada ni remotamente cercano o alguna analogía que pueda usar acá; estoy en blanco.  :P
Pero sos blanco y sol. Sos puro, cálido y luz.
En estos momentos de mi vida sos como mi sol favorito: el de otoño. Tus rayos me llegan de una forma suave, que te envuelve, que te invita a dormir bajo su cuidado, bajo el sol de otoño te sentís a salvo y cómoda, en paz… ¡Cuánta paz me das!
No creo que ni siquiera te des cuenta… pero eso es porque no es fácil verte, la mayoría se fijaría en tus chistes, en tu alegría, en tu gilipollez constante de 24 por 7; pero yo, que soy un agente que vive en la oscuridad, puedo notarlo con más facilidad. Sos tan ingenuo, tan bueno, tan…tan NO roto… o sea, sí. Estás roto, pero eso no te ha corrompido, eso no ha destruido tu alma.
Creo que por eso anhelo tanto tu compañía, porque vos todavía sos capaz de respirar sin darte cuenta. Las personas rotas, como yo, van a saber de lo que hablo.
Todas y cada una de las respiraciones que damos están contadas. Cada paso marcado, cada camino sellado. Hay algo que deberías saber de los agentes de oscuridad como yo…SENTIR NOS DUELE. Cada vez que nos animamos a un sentimiento nos invade el pavor, la angustia, la desesperación. Cada vez que nos damos cuenta que nuestro oscuro corazón sigue siendo capaz de sentir, volvemos a percibir la sangre correr por nuestras venas, pero no de forma natural y vivaz, sino de forma densa, espesa, como si fuera algún tipo de milagro sobrenatural que nuestros corazones sean capaz de generar un sentimiento…
POR ESO NOS DUELE COMO LA PUTA MADRE.
Pero al mismo tiempo es alucinante, y acá estoy yo en mi inestable universo de interminables supernovas, agujeros negros y big bangs sin fin y después te miro, ahí vos, tan tranquilo que me formás galaxias enteras con sólo sonreír.

And honey, you rock my world.    
                                                                            
Y todo se llena de NO SÉ, NO SÉ, NO SÉ.
Todo se vuelve blanco. Y lo peor es que no lo notás. No te das cuenta del bien que me hacés, de lo que me gusta hablar con vos… de que sos el único que fácilmente me saca una sonrisa, en este tiempo en el que sólo quiero llorar.
Odio que tengas ese efecto en mí.
Lo detesto, con toda mi alma porque se supone que no iba a volver a pasar, que ya había entendido, que había crecido.
Pero NO.
La señorita tenía que conocer un sol, tenía que gustarle quedarse ahí, a pesar de que sabe que luz y oscuridad existen, pero lejos una de la otra…
Pero…TU PUTA SONRISA. Esa perra tiene la culpa de todo. Tiene la culpa de que te hable, tiene la culpa que te interrogue pero ¿podés culparme? Soy como una polilla cegada por la luz, sé que no es lo mejor, que me voy a terminar quemando, pero es inevitable que me aleje, es inevitable que me acerque a vos.

FUCK.

Así que aquí estoy, con toda esta oscuridad que es todo y es nada, que te quiere y que no; que te sueña y se despierta, a ver si sos real, que te piensa y te mira, que te habla y te delira…


Y para terminar con conclusión ¿Acaso no brilla el sol por qué está suspendido en la oscuridad?



¿Qué voy a hacer con lo que siento por vos?

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